Los investigadores de un reciente estudio se dedicaron a rastrar los artículos científicos relativos a investigaciones sobre el uso de apps en el tratamiento de la esquizofrenia. Encontraron 5 investigaciones:

• El de Palmier-Noel et al, que fue uno de los primeros en examinar el papel de los teléfonos inteligentes en la esquizofrenia. Los autores valoraron la utilidad de utilizar los teléfonos inteligentes como una plataforma para recoger resultados de tests clínicos en tiempo real. La aplicación permitía pasar test de 12 ítems de una escala de esquizofrenia llamada PANSS y 2 de la Escala de Depresión Calgary (CDS). Los cuestionarios se pasaron hasta 6 veces al día durante 1 semana a 36 pacientes. El estudio encontró que las aplicaciones de teléfonos inteligentes se pueden utilizar para obtener autoevaluaciones clínicamente significativas de los síntomas psiquiátricos.

• Ainsworth et al compararon cómo los pacientes con esquizofrenia reportaron sus síntomas con una aplicación de teléfono inteligente frente a la presentación de informes mediante mensajes de texto (SMS). Veinticuatro pacientes con esquizofrenia participaron recibiendo 4 encuestas cortas acerca de sus síntomas por día. Los resultados mostraron que el seguimiento de los síntomas mediante una app era preferible a mensajes de texto: los participantes completaron las evaluaciones de los síntomas en la app en promedio casi 5 veces más rápido que en la plataforma de mensajería de texto. Además, los participantes completaron un número significativamente mayor de las entradas al utilizar la aplicación de teléfono inteligente nativa de utilizar la interfaz de mensajes de texto.

Desde Nueva York nos llega un interesante estudio realizado gracias a una encuesta de 1604 usuarios de teléfono móvil, a los que se les preguntó sobre sus hábitos en cuanto al uso de Apps de salud.

Los investigadores encontraron que un 58,23 % de los encuestados se habían descargado alguna App de salud, mayoritariamente de fitness o nutrición. Los que no se instalaban aplicaciones de salud, decían no hacerlo por falta de interés, por el coste, o por el temor a la falta de privacidad del tratamiento de sus datos.

Jóvenes , educados y obesos eran mas propensos a bajarse apps de salud.

Los autores de un reciente estudio científico revisaron las aplicaciones disponibles sobre Urología, con el objetivo de evaluar el nivel de participación de los profesionales de la salud y las asociaciones científicas de Urología en su desarrollo. Para ello los investigadores buscaron en la biblioteca médica PubMed, además de en el iTunes de Apple y del Google Play Store de Android, aplicaciones de Urología, disponibles en Inglés.

A principios de año se publicó un estudio exhaustivo sobre el uso de tecnologías móviles para el proceso de atención a las personas con cáncer.

Partiendo de la base de que los nuevos modelos de atención ponen mayor énfasis en el papel del paciente y la autogestión de su condición; y que por otra parte, se persigue la eficacia de la atención y en la calidad de vida, el papel de la salud móvil (mHealth), podría ser clave. Los autores se fijaron en cinco “tecnologías” mHealth de apoyo a los ciudadanos y a los pacientes: los SMS, las Apps con aparatos móviles, dispositivos específicos de monitorización de síntomas, teleasistencia y Redes Sociales.